Esta experiencia ya tiene sus primeros brotes en la
misma Dirección Regional de INDAP y la localidad de Pintados, donde se ha sembrado
experimentalmente maní, que es un cultivo funcional dada su característica de
ser una leguminosa que como género, mejora en términos generales las
características físico-químicas del suelo donde se siembra.
Paralelamente se firmará un convenio con el Instituto
de Investigaciones Agropecuarias (INIA) que permitirá instalar 15 parcelas
demostrativas en la Provincia del Tamarugal, donde se espera profundizar la
experiencia lograda hasta el momento con el maní.
“El cultivo de maní y las 15 parcelas demostrativas
que se implementarán tiene directa relación con volver a poner el foco en la
extensión agrícola, es decir la transferencia de nuevos conocimientos hacia los
agricultores. No es sólo probar por qué sí, sino que esto va de la mano con un
trabajo estratégico que realizaremos con
el INIA y que responde a una mirada basada en una planificación de mediano
plazo”, explicó el director regional de INDAP, Claudio Koplow.
Agregó que esta estrategia busca plantear a los
agricultores alternativas para diversificar el trabajo agrícola con innovación,
con un replanteamiento de los sistemas productivos, y que se basa en la
observación y el conocimiento evaluados en terreno a través de estas parcelas
demostrativas. “Entonces el maní es un ejemplo de los muchos otros cultivos que
queremos probar, porque hay que diversificar la producción, independiente de
tener cultivos consolidados y tradicionales como el ajo, la zanahoria, el maíz,
entre otros”.
Koplow expresó que el maní, semillas que fueron
suministradas por la usuaria de INDAP O’Higgins Felicita Moreno, no fue elegido
al azar, ya que es una leguminosa que no sólo beneficia al suelo, sino que
también tiene múltiples usos, como por ejemplo tostado, salado, saborizado,
como aceite, mantequilla, entre otros.
A este plan integral de instalar parcelas
demostrativas y probar nuevos cultivos, como el maní, se agrega la intención de
incorporar una nueva práctica en el programa de Recuperación de Suelos regional,
la rotación de cultivos, que apunta a mejorar naturalmente los suelos
productivos sin intervención de químicos ni fertilizantes, y que requiere
necesariamente alternar cultivos tradicionales con leguminosas.
El funcionario resaltó por otro lado que “esto de
innovar también ha repercutido en el presupuesto 2014, en donde la región
obtuvo siete millones extraordinarios para financiar proyectos eminentemente
innovadores, en donde esperamos invitar como INDAP, a las instituciones
académicas de la región a participar en el proceso de selección”.
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