En el
marco del programa “Gestión de la innovación para las Cooperativas”,
desarrollado por FIA y el Ministerio de Economía, representantes de la Federazione
Trentina Della Cooperazione (Italia) mostraron su modelo cooperativo único en
el mundo a organizaciones y autoridades rurales en Chile.
Si bien, destacan por sus pastas, pizzas,
voces memorables como la de Pavarotti o composiciones trascendentales como las
de Vivaldi, los italianos resaltan también por sus capacidades económicas.
Principalmente en Trento, una provincia al noreste de Italia, que hoy se
instala como un ícono del cooperativismo mundial. Sistema emblemático que la
semana pasada fue presentado en Chile por representantes de la Federazione
Trentina Della Cooperazione, quienes visitaron el país en el marco del programa
“Gestión de la innovación para las Cooperativas”, que desde 2014 viene
impulsando la Fundación para la Innovación Agraria (FIA) del Ministerio de
Agricultura en conjunto con la División de Asociatividad y Economía Social del
Ministerio de Economía.
Durante su visita, la misión trentina
comandada por el jefe de Relaciones Internacionales y Oficina de Proyectos de
la Federazione, Egidio Formilan, su especialista en Formulación de Proyectos,
Elena Luminita Badeanschi, y el representante de Agrofair Italia, Lorenzo
Boccagni, se reunió con autoridades de FIA, de la cartera de Economía y
profesionales del Instituto de Desarrollo Agropecuario (INDAP), institución que
ha participado en esta iniciativa por medio de su Programa de Asociatividad
Económica (PAE).
La comitiva visitó además dos de las
cooperativas más importantes del país, Coopeumo y Loncomilla, ubicadas a 150 y
230 kilómetros al sur de Santiago, respectivamente. Aquí, junto con profundizar
en el trabajo de estos agricultores chilenos, los italianos estrecharon lazos
ya formados en el viaje que llevó a representantes de dichas cooperativas a la
provincia de Trento a principios de este año, a partir de una iniciativa
liderada por el director ejecutivo de FIA, Héctor Echeverría. Dicha experiencia
constituyó el primer paso del programa “Gestión de Innovación las
Cooperativas”.
“El sistema cooperativo de Trento es un caso
único en Europa, dado su alto desarrollo. En una población de 500 mil
habitantes, más del 50% está involucrado directa o indirectamente con empresas
cooperativas. De hecho, el sistema productivo campesino trentino cuenta con 20
mil pequeños productores, donde el cooperativismo es la única forma para salir
al mercado. Así, controlan toda la cadena de valor, no sólo en producción sino
también en transformación y comercialización”, destacó Egidio Formilan en su
presentación, agregando que estos campesinos sólo cuentan con media y hasta una
hectárea en un territorio montañoso muy difícil de cultivar, por lo que se hace
imprescindible trabajar de forma cooperativa.
Legislación
y Educación
Otro de los puntos que interesó a las
autoridades y a los agricultores de las cooperativas locales tras la visita,
fue el desarrollo legislativo con el que opera dicho sistema económico en
Trento.
Según Formilan, hace más de un siglo Italia
desarrolló a nivel país un sistema normativo de apoyo al modelo cooperativista.
Escenario que se fortaleció en la provincia de Trento, debido a su autonomía
legislativa que durante todos estos años le ha permitido formular sus propias
leyes. Es por ello que hoy la localidad reconoce el cooperativismo como una
medida de fomentar el desarrollo de un área rural que pudo salir de la pobreza
sufrida a inicios del siglo XX.
“Uno de los grandes ejemplos de éxito en
Trento es el sector lechero. Actualmente si sus productores vivieran sólo de
las ventas de su leche dentro del sistema económico italiano ejerciendo de
forma privada, tendrían que cerrar dado al bajo precio en que se encuentra hoy
este producto. Mientras que por medio del cooperativismo, ellos han podido
agregar valor y vender no sólo la leche sino un producto elaborado como el
queso parmesano trentino que les ha permitido incrementar sus ingresos entre
400 a 500 veces más. Y eso se ha logrado controlando toda la cadena de
transformación instaurada en el modelo cooperativista”, afirma Formilan.
Resultado que se afianza con la cultura
cooperativista inculcada en cada uno de sus habitantes, según indica el
experto. “No se nace cooperativista, es una identidad que hay que crearla desde
niños. Por ello, uno de los grandes trabajos que hacemos en la Federazione es
educar a partir de kínder y primaria, para que los estudiantes desarrollen una
identidad cooperativa que al llegar a adultos los ayuda a ver el mundo
cooperativo como una alternativa”, señaló el representante de la Federazione.
Escaso
financiamiento y renovación generacional
Frente al éxito de la economía trentina, los
desafíos para Chile en materia de cooperativismo resultan evidentes. Así lo
notó Egidio Formilan tras visitar las cooperativas Loncomilla y Coopeumo en
que, pese a reconocer el gran impacto económico que éstas ejercen sobre la
comunidad y sus socios, destacó las dificultades que tienen para acceder a
créditos y la ausencia de las nuevas generaciones en su gestión. “A su vez,
existen problemas de comunicación y promoción de lo que realizan las
cooperativas, provocando que la sociedad no conozca tales experiencias
exitosas, junto con la poca relación que tienen a nivel territorial con nuevas
cooperativas”, recalcó.
Diagnóstico compartido por los agricultores
de Coopeumo y Loncomilla, quienes se mostraron dispuestos a trabajar en
conjunto con los italianos. “Hemos concordado en continuar esta colaboración a
través de visitas y proyectos bajo el patrocinio de FIA, que durante todo este
tiempo ha actuado como guía. Es decir, pretendemos hacer un intercambio de
cooperación entre territorios”, indicó Formilan.
Trabajo que, según comentó el director
ejecutivo de FIA, Héctor Echeverría, se iniciará dentro de los próximos meses.
“A partir de la visita de la misión trentina a Chile, intentaremos materializar
sus experiencias en regiones como la IX y la VII, donde existen cooperativas
que funcionan relativamente bien. Para eso, exploraremos algunos instrumentos
de apoyo internacional que nos permitan hacer un proyecto en conjunto en donde
podamos recibir toda la enseñanza en el fortalecimiento de las cooperativas y
también avanzar en materia de comercialización. Por ello nos hemos dispuesto
vincular a dos cooperativas chilenas en el mercado de berries para que avancen
no sólo en su comercialización sino también en la gestión desde una perspectiva
de innovación. De esta forma, dentro de los próximos meses elaboraremos un
proyecto el cual será presentado a un fondo internacional a fin de apalancar
recursos para financiar dicho programa”, señala Echeverría.
Durante su itinerario, la Federazione se
reunió también con la Unión Nacional de Agricultura Familiar Campesina (UNAF) y
la Confederación de Cooperativas Campesinas Campocoop, donde intercambiaron
experiencias e información con el objetivo de fortalecer el cooperativismo
rural en Chile.
#Iquique
No hay comentarios.:
Publicar un comentario