Sobre
le Convención para la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra
la Mujer, CEDAW.
Con miras a la presentación del informe de
Chile sobre el cumplimiento de este acuerdo internacional.
La Ministra del Servicio Nacional de la
Mujer, Claudia Pascual Grau, inauguró esta mañana la capacitación sobre la
Convención para la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la
Mujer, CEDAW, dirigida a funcionarias y funcionarios públicos de ministerios,
servicios públicos, organismos autónomos del Estado, Poder Legislativo y Poder
Judicial.
Este seminario, organizado por el Sernam
junto a la Oficina Regional del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para
los Derechos Humanos y la Dirección de Derechos Humanos del Ministerio de
Relaciones Exteriores, se llevó a cabo en el marco de la presentación del
séptimo informe de cumplimiento de este tratado internacional que debe realizar
nuestro país en el mes de octubre próximo.
“Ustedes participarán activamente en la
elaboración de este informe en el que como Estado podremos dar cuenta de las
medidas que hemos adoptado para el cumplimiento de la Convención, los avances
obtenidos en el último tiempo, pero también los desafíos y dificultades que han
surgido en el camino", indicó la Ministra Pascual a las y los asistentes.
En ese sentido, la titular del Sernam destacó
que “En los últimos 25 años, nuestro país ha registrado importantes avances en
la lucha por la igualdad de género. El compromiso por erradicar la
discriminación y la violencia contra las mujeres no sólo ha sido asumido por el
Servicio Nacional de la Mujer, como la institucionalidad pública mandatada para
ello, sino que también ha permeado progresivamente el trabajo de otras
instituciones y poderes del Estado, en lo que hemos llamado transversalización
del enfoque de género”.
Junto con ello, dijo que “las mujeres son el
52,7% de quienes viven en Chile y si las políticas públicas no se construyen
considerando sus diversas realidades y necesidades, difícilmente podremos
avanzar en relaciones equitativas entre mujeres y hombres. Poder vivir sin
discriminaciones de ningún tipo es un asunto de derechos humanos”.
La Ministra agregó que “suscribir
voluntariamente las obligaciones internacionales consagradas en la CEDAW fue un
importante paso para el reconocimiento de los derechos de las mujeres en Chile.
Pero aún falta mucho camino por recorrer para lograr que puedan ejercer y gozar
de sus derechos en igualdad de condiciones que los hombres, y la Convención
constituye una carta de navegación para alcanzar ese objetivo”.
La autoridad señaló que la violencia y
discriminación contra las mujeres sigue siendo un fenómeno sistemático
profundamente arraigado en nuestras realidades. Y expresó que “uno de los
desafíos que tenemos como Gobierno y como Estado de Chile es cumplir con el
compromiso de la Agenda de Género y transitar desde una legislación de primera
generación, que condena la violencia en el contexto de las relaciones
familiares, a una de segunda generación, que es capaz de abordar el fenómeno
desde una mirada más amplia”.
Asimismo, la Ministra indicó que “como
funcionarias y funcionarios del Estado de Chile estamos llamados, desde nuestras
distintas labores y competencias a encontrar la manera de asegurar el respeto y
garantía de los derechos de las mujeres en la vida cotidiana. Somos parte
fundamental del cambio cultural al que tenemos que transitar como país, tanto
desde nuestras propias actitudes y comportamiento, como desde la difusión que
podemos hacer de estas ideas con nuestro entorno”.
Claudia Pascual enfatizó que “la
discriminación constituye una violación a los derechos humanos de mujeres y
niñas y la comprensión de este planteamiento interpela a la sociedad en su
conjunto en su progresiva erradicación. Chile debe avanzar en el abordaje de
esta problemática, a través de un compromiso colectivo que se haga cargo de las
desigualdades e impulse un cambio cultural y una vida libre de violencias para
las mujeres”.
CEDAW
La Convención para la Eliminación de Todas
las Formas de Discriminación contra la Mujer, conocida como “La Carta Magna de
las Mujeres” de la Asamblea General de las Naciones Unidas, desde 1979 se ha
transformado en el principal instrumento jurídico para hacer frente a la
discriminación contra las mujeres y ha devenido en acciones relevantes por
parte de los Estados para avanzar en este objetivo. Nuestro país ratificó la
CEDAW en 1989.
#Iquique
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