Obras descubren diferentes procesos constructivos
Las obras son financiadas por Compañía Minera Cerro Colorado y ejecutadas a través de
Casi cuatro siglos de historia otorgan a la iglesia San Marcos de Mamiña un valor patrimonial particular, no sólo por sus grandes dimensiones, sino también porque ha sido la propia la comunidad la que ido levantando su templo a lo largo del tiempo.
Las obras de restauración comenzaron a mediados de marzo, pero la complejidad de las técnicas con que la iglesia fue construida, ha generado que el proyecto deba irse reformulando de acuerdo van surgiendo nuevos hallazgos.
“Son intervenciones artesanales que han servido para reforzar momentáneamente la estructura. En este proyecto pretendemos unificar todas esas visiones en un proyecto coherente, sistemático e integrado”, explicó Jorge Atria, arquitecto asesor de
La iglesia original fue construida con piedra y barro y, a medida que avanzan los trabajos, han ido apareciendo contrafuertes, pilares de concreto, rudimentos de piedra más labrada, todos con distintos métodos constructivos que fueron, en definitiva, los que hicieron colapsar la edificación durante el terremoto de junio de 2005.
“El sismo puso en competencia todos estos sistemas, volcando los más rígidos a los más débiles y, aunque la estructura no cedió, hubo daños internos. Entendemos que no podemos eliminar las intervenciones hechas por la comunidad, porque son parte de la historia del monumento, por lo que estamos equilibrando la estructura para que pueda soportar un eventual nuevo sismo”, precisó René Mancilla, arquitecto a cargo de las obras.
Valor patrimonial
La iglesia de Mamiña posee una nave central y dos naves laterales o transeptos que dan a la planta la forman de una cruz andina que, a diferencia de la cruz latina característica de los templos del interior de la provincia, tiene sus cuatro puntas a distancias equivalentes del centro. Además, posteriormente la comunidad levantó una sacristía y una bodega a los costados norte y sur respectivamente; ambas están siendo reconstruidas.
Por otra parte, la iglesia cuenta con dos torres coronadas por campanarios de madera que vigilan el portal de piedra rosada labrada. “Ésta es una de las piezas más sensibles por su valor patrimonial y está siendo reforzada”, dijo Atria. Las obras también contemplan el empedrado de la explanada y los alrededores del templo y la construcción de un muro de contención por detrás del mismo.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario