Presidente de la Cámara de Comercio, Rafael Montes
La Cámara de Diputados acordó regular
(y no prohibir) los "tragamonedas populares", lo que generará una ludopatía
en numerosos pobladores que los perjudicará no sólo a ellos sino a sus grupos
familiares. De igual forma, alrededor de los locales donde hay tragamonedas se
genera una peligrosa actividad delincuencial.
El presidente de la Cámara de Comercio
de Iquique, Rafael Montes, señaló que las consecuencias de regular y no
prohibir los tragamonedas son nefastas y los señores diputados tendrán que
responder a la comunidad.
“Como se informó en medios nacionales,
un apoyo trasversal registró en la Cámara de Diputados un proyecto para regular los llamados “tragamonedas
populares” que existen en numerosos almacenes y locales del país. La idea
echaría por tierra el anuncio del Gobierno de prohibir la operación de estas
máquinas, que según fuentes de la industria llegan a 700 mil en todo Chile, e
involucran a unos 220 mil microempresarios. Tal decisión es absolutamente
negativa y trae consecuencias que incentivan la ludopatía”, aseveró el
dirigente gremial.
Un diputado (Aldo Cornejo, DC) ha
dicho una aberración por cuanto ha criticado al Ejecutivo diciendo que no puede
abstraerse y negarse a discutir una realidad y recalcó la magnitud del fenómeno
social y económico que hay detrás de la entretención con juegos electrónicos
requiere de un marco legal que posibilite una regulación justa, cuando debería
apoyar la prohibición porque el negocio de los tragamonedas ha convertido hasta
almacenes en pequeños casinos de juegos y toda la delincuencia que se genera
alrededor de este tipo de juegos de azar”.
El presidente de la Cámara de Comercio
agregó que el parlamentario tratando de argumentar y justificar la decisión
detalló que la normativa debería regular los aspectos técnicos, económicos y
sociales, a modo de asegurar la transparencia, la seguridad y la fe pública,
permitiendo a los miles de microempresarios y operadores realizar su actividad
sin amenazas ni persecuciones. No puede estar equivocado. No se trata ni de
amenazas ni persecuciones. Se trata de evitar la ludopatía en los pobladores,
hombres, mujeres y jóvenes y la delincuencia que se genera alrededor de este
tipo de negocios”, afirmó Montes.
Añadió que otros diputados señalaron
“que todos los chilenos tienen derecho a entretenerse libremente con una
regulación estricta y sin usura, desconociendo el verdadero problema social que
genera la ludopatía y la delincuencia. Llama la atención que ninguna ni
siquiera haya pronunciado la enfermedad que general el juego, que es la
ludopatía”.
De acuerdo a cifras de Fiden, de las
más de 700 mil máquinas existentes en Chile, 500 mil se encuentran en puntos de
ventas como almacenes, y las restantes en locales de máquinas.
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