jueves, agosto 11, 2016

Iniciativa de Sernameg Tarapacá bajo convenio con la Municipalidad de Alto Hospicio, durante el periodo de enero a julio del presente año:

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Cincuenta personas ingresaron al Centro de Hombres por una vida sin violencia.

Un total de cincuenta personas han ingresado de enero a julio al Programa Hombres por una vida sin Violencia, del Servicio Nacional de la Mujer y la Equidad de Género, bajo convenio con la Municipalidad de Alto Hospicio, el cual tiene cobertura en toda la Región de Tarapacá.

 Una atención para mayores de 18 años que han ejercido violencia contra su pareja o ex cónyuges, los cuales son derivados por el sistema judicial o por voluntad propia.

La coordinadora comunal del Centro, María Riquelme Torres, detalló que durante el año pasado asistieron 67 hombres y al mes de julio fueron 50 ingresos.

“Existen dos vías para estar dentro del programa, una es cuando son derivados de los tribunales de Iquique cuando cometen una falta de violencia intrafamiliar y otra es cuando ingresan de forma voluntaria”.

Sobre el proceso que inicia el hombre dentro de este dispositivo, Riquelme, precisó que “se analiza su razón de ingreso, historia de vida, comportamientos aprendidos, niveles de violencia ejercida y el tipo de agresión que pudo ser psicológica, física y económica, todo esto se logra en las sesiones de trabajo”.

Además, detalló que la dupla de profesionales está compuesta por 1 psicólogo y 1 trabajador sociales.  “De esta forma indagamos para construir un perfil de acción dentro de esta trayectoria de reeducación, con el sentido de que pueda entender que sus comportamientos y acciones ejercidas fueron violentas”.

Riquelme señaló que uno de los obstáculos es que el hombre reconozca sin culpar a la otra persona de sus actos. “Ellos deben entender que son los únicos responsables de sus reacciones y aunque varias veces justifican que sus parejas los provocaron, esto es un error del cual en las sesiones van entendiendo. Cuando se está en una relación negativa y violenta, cada uno es responsable de sus actos y si las cosas no fluyen con respeto y diálogo, se tiene la opción de finalizarla porque eso no es lo que quieren para sus vidas”.

Dentro de la acción de sensibilización y reconocimiento por parte de la persona, uno de los factores que indicen son los comportamientos aprendidos en la historia familiar.

“En nuestra sociedad se ha definido al hombre como proveedor único, definidor de reglas en la casa, sin la opción de llorar o mostrarse débil ante las presiones de la vida, lo cual no les permite expresar lo que sienten a otros para poder desahogarse. Esto es delicado porque al no tener una vía de escape a sus frustraciones, puede suceder que se desquitan con la familia o más cercano, alterando la estabilidad familiar. Todo esos comportamiento o actitudes se han ido pasando entre generaciones y es lo que nosotros vamos despejando en las sesiones para que la persona entienda que pueden cambiar su forma de pensar y ver la vida para su propia felicidad”.

TESTIMONIO
Un egresado del Centro de Hombres por una vida sin violencia de iniciales, M.R.F, decidió compartir su testimonio tras cumplir su ciclo. “Este programa me sirvió para darme cuenta de que hay muchas formas de violencia y uno no se da cuenta. En mi relación con mi ex pareja, la más duradera de 19 años, yo reaccioné muy mal muchas veces y de forma agresiva verbalmente sin llegar a los golpes, pero sí pegándole la pared o pateando una silla. Para mí eso no era violencia y me justificaba que era una forma de desahogarme, pero en ningún caso me daban ganas de pegarle a ella o a los niños. Yo jamás tomé cartas en el asunto y luego tuve que hacer el programa para poder superar la violencia, porque lamentablemente llegamos a instancias judiciales”.

Tras conocer esta decisión de tribunales manifestó que “pensaba para qué y no lo necesito, la responsable es ella o los niños que me hacían enojar, pero no me daba cuenta de que independiente de lo molesto que pudiera estar, nada justificaba como yo reaccionaba”.

Agregó que con esta experiencia “me ayudó bastante a comprender y a conocerme mí mismo, para identificar los síntomas cuando una conversación se está dirigiendo a un terreno muy agresivo, pero está en mí seguir dialogando y decidir parar una conversación cuando no nos está llevando a nada bueno. Hoy vivimos en un mundo muy agresivo y tienes que tratar de evitar caer en el juego de los demás y esa es la gracia del programa que te permite darte cuenta de cómo uno está actuando y reaccionando”.

DIRECCIÓN
El Centro de Hombres por una vida sin violencia de Sernameg bajo convenio con la Municipalidad de Alto Hospicio, funciona en Avenida Mártir Detective José Cubillos Rivera # 3089 – A, sector La Pampa.
#Iquique

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